jueves, 5 de enero de 2012

Confidencia o deseo

Corría el 26 de febrero del 2007 cuando empecé esta historia, durante unos días estuve trabajando en el texto y una ilustración para acompañarlo. Después quien sabe el motivo quedó como borrador hasta el día de hoy en que la retomo. No estoy seguro que sea la ilustración que tenía pensado poner en un principio pero cumple bien con su función.



Era un día como todos los demás, el hecho que nos consiguieramos reunir para compartir unas horas de nuestra ajetreadas vidas y ponernos al día hizo que dejara de serlo.
Las botellas de rioja y los bares iban quedando atrás mientras las conversaciones pasaban de lo trivial a lo personal. Fue llegado este punto cuando X, no quiere que diga su nombre y me parece absurdo bautizarlo con otro, nos contó lo siguiente:

Su novia estaba cansada de que él la viera como algo fragil que cualquier cosa o comentario subido de tono podía dañar y que la puteara tatareando o cantando "Siempre que vuelvo a casa te pillo en la cocina embadurnada de harina, con las manos en la masa. Niña, no quiero platos finos,vengo del trabajo y no me apetece pato chino a ver si me aliñas, un gazpacho con su ajo y su pepino. Papas con arroz, bonito con tomate, cochifrito,caldereta, migas con chocolate,cebolleta en vinagreta, morteruelo, lacón con grelos, bacalao al pil-pily un poquito perejil." cada vez que se pasaba a visitarla.
Hace unos días fue a su casa ella le esperaba como en el dibujo , él incluso pensó que se equivocara de piso y salio para comprobarlo, no la reconocía sin las capas y capas de ropa debajo de las que solía encontrar y con semejante pelucón rubio o era... si volvio a entrar y los demás detalles los dejo para vuestra imaginación.





No hay comentarios: